martes, 17 de julio de 2012

DIOS TE CUIDARA SIEMPRE QUE CAMINES EN MEDIO DEL MAR!!!!!!!!!!


lunes, 16 de julio de 2012


Devocionales Escritos - Caminando en medio del mar

Caminando en medio del mar 
La mayoría de nosotros esperamos milagros de Dios en nuestra vida, nuestra familia o en personas a quienes estimamos. Estoy seguro que una gran parte de los que ahora me leen tienen una petición de esas que creemos casi imposibles y que solo esta en las manos de Dios cumplirla.

Y es que a veces queremos que Dios haga todo el trabajo, sin darnos cuenta que en ocasiones, Dios proveerá los medios para llevar a cabo ese milagro que esperamos, pero dependerá de nosotros el dar los pasos necesarios para que ese milagro se concrete.

Y es que el valor y la fe que mostremos serán de gran ayuda para ver lo que para nosotros era imposible de ver.

Cuando Moisés saco a los israelitas de Egipto, poco después Faraón envió a su ejercito tras ellos para traerlos devuelta como esclavos. Cuando los israelitas vieron que el ejercito egipcio se acercaba, comenzaron a quejarse contra Moisés diciéndole el porque los había traído, que era mejor ser esclavos en Egipto que cadáveres en el desierto.

Sin embargo Dios siempre tiene un plan maravilloso, Él jamás mueve una pieza si no sabe todo lo que puede pasar y como poderlo solucionar.

Dios le dio unas instrucciones a Moisés: “Luego el Señor le dijo a Moisés: «¿Por qué clamas a mí? ¡Dile al pueblo que se ponga en marcha! Toma tu vara y extiende la mano sobre el mar. Divide las aguas para que los israelitas puedan pasar por en medio del mar, pisando tierra seca. Yo endureceré el corazón de los egipcios y se lanzarán contra los israelitas. La grandeza de mi gloria se manifestará por medio del faraón y de su ejército, sus carros de guerra y sus conductores. Cuando mi gloria se exhiba por medio de ellos, ¡todo Egipto verá mi gloria y sabrán que yo soy el Señor!».” Éxodo 14:15-18 (Nueva Traducción Viviente). Me llama la atención que Dios le dice: “¿Por qué clamas a mí?”, y es que ¿A quien más iba a clamar?, luego Dios le dice: “¡Dile al pueblo que se ponga en marcha!”, en pocas palabras: ¡Hagan su parte!, porque Él haría la suya.

Dios cuido a los israelitas todo el tiempo, colocando su nube detrás y no permitiendo que los egipcios se acercaran. Luego cuando estuvieron frente al mar rojo, en donde no había mas camino que transitar, Moisés obedeció las instrucciones que Dios le había dado: “Luego Moisés extendió la mano sobre el mar y el Señor abrió un camino a través de las aguas mediante un fuerte viento oriental. El viento sopló durante toda la noche y transformó el lecho del mar en tierra seca. Entonces el pueblo de Israel cruzó por en medio del mar, caminando sobre tierra seca, con muros de agua a cada lado.” Éxodo 14:21-22 (Nueva Traducción Viviente).

Hasta este momento de la historia, Dios estaba haciendo su parte, era un milagro sorprendente, algo nunca antes visto, algo maravilloso que de tan extraordinario podría hasta dar miedo.

La parte de Dios estaba hecha, el milagro estaba servido, ahora era el turno del pueblo de Israel, ahora les tocaba su parte. Y es que transitar en medio del mar no es fácil, caminar y ver a sus lados dos muros de agua, ¿Qué tal si el viendo dejaba de soplar y los muros de agua volvían a la normalidad?, cada paso de los israelitas en medio de esa tierra seca, era un paso de fe, eran pasos que solo hombres o mujeres que tuvieran la confianza plena en que Dios no los iba a dejar ahogarse o morir podían dar.

Yo me imagino caminando en medio de ese pasillo de tierra seca, pero con dos muros gigantes de agua, sinceramente era para tener mucho miedo, era como para no confiarse, sin embargo es allí en donde debemos poner en practica nuestra parte en el milagro que Dios quiere hacer en nuestra vida.

A veces Dios pone totalmente servido nuestro milagro y lo único que nosotros tenemos que hacer es caminar por fe para que ese milagro se concrete, pero en muchas ocasiones no tenemos ni la intención de caminar en medio de ese milagro, sino que queremos dejarle todo a Dios y luego cuando no vemos nuestro milagro cumplido le terminamos echando la culpa a Él, como que si Él no hubiera hecho su parte.

Hoy quiero invitarte a hacer tu parte en el milagro de Dios, estoy seguro que Dios se querrá manifestar en tu vida, estoy seguro que Él utilizara su creatividad y su poder ilimitado para obrar a tu favor, para ponerte servido tu milagro, pero se necesitara de tu VALOR y de tu FE para que veas cumplido ese milagro, ¿Estas dispuesto?

Es hora de caminar en medio de ese mar, es hora de no permitir que nuestros pensamientos de incredulidad nos eviten caminar por fe en medio de esos dos muros de agua. Dios ya sirvió el milagro, ahora es nuestro turno de caminar conVALOR y FE en medio de esas dos murallas de agua que humanamente dan mucho miedo, pero que si ese viento que las detiene proviene del Señor, entonces: ¡No hay nada que temer!

Camina por fe, créele a Dios, haz tu parte, porque Dios sin lugar a dudas hará la suya. Hoy es un día para que te apropies del milagro que Dios ya comenzó a hacer en tu vida, Dios esta sirviéndote el milagro, ahora tú toma valor y ten mucha fe en Él, y ¡CAMINA!

¡Dios te cuidara siempre que camines en medio del mar!

lunes, 9 de julio de 2012


domingo, 8 de julio de 2012

Devocionales Escritos - Lucha Diaria

Lucha Diaria

Todos los que hemos recibido el amor de Dios en nuestra vida y que ahora vivimos para Él debemos estar conscientes que nos encontramos en una lucha diaria.

Todos los días libramos una batalla en nuestra vida, entre querer agradar a Dios y querer satisfacer nuestros instintos pecaminosos sean estos de cualquier tipo.

Aquel que no sea consciente de esto o que no le ponga el debido cuidado que se merece, se encontrara fácilmente con tentaciones de todo tipo que poco a poco lo querrán arrastrar hacia el error.

La Biblia dice: “¡Estén alerta! Cuídense de su gran enemigo, el diablo, porque anda al acecho como un león rugiente, buscando a quién devorar.” 1 Pedro 5:8 (Nueva Traducción Viviente).

No importa lo fuerte que creas que eres, ni la enorme capacidad que creas tener para poder resistir al enemigo, no se trata de ti, ni de lo bueno que seas para esto o aquello, se trata de que al igual que todos los humanos eres de carne y hueso y con una naturaleza que te lleva fácilmente a pecar. Por esa razón el Apóstol Pedro nos recomienda: “¡Estén alerta!”, eso nos debería llevar a pensar que en cualquier momento el enemigo puede lanzar sobre nuestra vida uno de sus ataques para hacernos caer.

Por esa razón también la Biblia nos dice: “Por eso, que nadie se sienta seguro de que no va a pecar, pues puede ser el primero en hacerlo.” 1 Corintios 10:12 (Traducción en lenguaje actual). Este mismo pasaje bíblico en otra versión dice: “Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga.” 1 Corintios 10:12 (Reina-Valera 1960).  

No se trata de creerse muy fuerte ante el pecado y por esa razón andar en busca de el, en la Biblia leemos que Dios nos motiva a huir del pecado, a alejarnos de el y no a buscarlo: “No te dejes llevar por las tentaciones propias de tu edad. Tú eres joven, así que aléjate de esas cosas y dedícate a hacer el bien. Busca la justicia, el amor y la paz, y únete a los que, con toda sinceridad, adoran a Dios y confían en él.” 2 Timoteo 2:22 (Traducción en lenguaje actual).

Quizá los últimos días has andado detrás del pecado, te has creído lo suficientemente fuerte y has estado en lugares que tu muy bien sabes que no deberías estar.

Quizá has estado jugando poco a poco con fuego sin quemarte y eso te ha hecho creer que el pecado no puede en contra de ti, sin embargo sin que te des cuenta poco a poco estas siendo arrastrado al campo de batalla del enemigo en donde te querrá rodear y cuando lance su ataque final te querrá herir de muerte.

No permitas que el enemigo te engañe haciéndote creer muy fuerte, tú al igual que yo somos vulnerables, tenemos una tendencia a pecar y por muy fuertes que creamos que somos, podemos caer en cualquier momento. Por esa razón la Biblia nos aconseja: “Así que humíllense delante de Dios. Resistan al diablo, y él huirá de ustedes.” Santiago 4:7 (Nueva Traducción Viviente). Humillarse delante de Dios tiene que ver con reconocer nuestra debilidad al pecado y nuestra dependencia total de Dios.

¿Quieres realmente ser fuerte ante el pecado?, entonces humillemos delante de Dios, obedezcamos su Palabra y si su palabra nos motiva a huir de todo aquello que nos incita a pecar, entonces? ¡Hagámoslo!, humillarse delante de Dios tiene que ver con buscar cada día agradarlo a Él, reconocer nuestra necesidad de Él y reconocer que sin Él nada somos, que todas nuestras capacidades provienen de Él y por lo tanto le debemos todo.

No juegues con fuego, no creas que siempre tendrás la capacidad de parar en el momento indicado, ¿Qué tal si un día esa capacidad de la que tanto te jactas te falla?, no permitas que el enemigo te saque ventaja, al contrario, sácale ventaja tú, buscando a Dios y huyendo alejándote de todo aquello que te quiera llevar a pecar.

¡Dios busca gente determinada a huir del pecado y acercarse a Él!

martes, 3 de julio de 2012


lunes, 2 de julio de 2012

Predicas Escritas - Oir y Hacer

TEMA: “OIR Y HACER” 


TEXTO: SAN MATEO 7:24-29 

INTRODUCCIÓN
Creo que la mayoría hemos escuchado la siguiente expresión: “A este por un oído le entra y por otro le sale” haciendo referencia al olvido, la indiferencia y la falta de práctica de lo que se oye.

I. ¿CÓMO ES COMPARADA LA PERSONA QUE OYE LA PALABRA Y NO LA HACE? 
A. Como una persona necia que actúa en base a su propio criterio y no a la voluntad de Dios. 
B. Como una persona incapaz de soportar las crisis de la vida (lluvia, ríos y vientos) V.27 
C. Como una persona que enfrenta grande ruina.


II. ¿CÓMO ES COMPARADA LA PERSONA QUE OYE Y HACE? 
A. Como alguien prudente que actúa no en base a su propio criterio sino en base a la voluntad del Señor. 
B. Como alguien capaz de soportar las crisis de la vida. (Lluvia, ríos, viento) 
C. Como alguien que enfrenta y supera los problemas. 

CONCLUSION:
¡Guerreros del Señor! He aquí la clave para tener una vida con fundamento: OÍR Y HACER El Señor nos dice hoy: “SED HACEDORES DE LA PALABRA Y NO TAN SOLAMENTE OIDORES OLVIDADIZOS”